¿Quieres saber qué ver en Dublín? Entonces, estás en el lugar adecuado. 🙂 La capital de Irlanda, destaca por un admirable y reconocido ambiente literario, una vida nocturna muy animada y un amplio rango de artistas callejeros que convierten a la ciudad, en un lugar perfecto para visitar.

Dublín, al igual que la mayoría de las capitales europeas, es ideal para una pequeña escapada. Unos tres o cuatro días serán más que suficientes para no perderse nada, siendo además una ciudad muy fácil de callejear y conocer.
En este post, vamos a contarte qué planes hacer en Dublín y cómo disfrutar de la ciudad. 🙂
- ¿Qué ver en Dublín? Nuestros 15 planazos
- 📸 Conoce la ciudad haciendo un free tour por Dublín
- 🍺 Disfruta de unas buenas pintas: la cerveza Guinness
- 🌊 Excursión a los acantilados de Moher
- 🎼 El barrio de la música y la cerveza: Temple Bar
- 🎓 Trinity College: la universidad más antigua de Irlanda
- 🚥 Recorre O’Connell Street
- 👱♀️ Molly Malone: un icono de la ciudad
- ✒️ Acércate al parque Merrion Square y la estatua de Oscar Wilde
- 🍽️ The Church, un bar-restaurante de lo más peculiar
- 🍻 Ruta por las tabernas irlandesas
- 🥔 ¿Dónde comer en Dublín?
- ⛪ Visita las catedrales Christ Church y St. Patricks
- 🎸 Disfruta de la música en directo en Grafton Street
- ☘️ Descansa en el parque St Stephen’s Greens
- 🏨 Alojarse en el centro de Dublín: la mejor opción
¿Qué ver en Dublín durante 2 o 3 días?
Dublín se puede ver perfectamente en 2 ó 3 días. En el caso de que quisieras hacer alguna excursión, añadiríamos un día más al viaje. Por eso, no solo vamos a contar algunos planes para hacer en la propia ciudad, si no que también en sus alrededores, como visitar el pueblo de Galway o los acantilados de Moher. Si quieres saber más, sigue leyendo 😊.
Conoce Dublín haciendo un free tour
Una de las mejores maneras de descubrir un lugar nuevo, es haciendo un free tour, donde te permite conocer los mejores rincones y las historias y anécdotas más rocambolescas de la ciudad. Es uno de los planes más realizados, principalmente, en ciudades europeas. En este viajecillo me escapé con unas amigas y nos animamos a reservar uno para ver Dublín y no perdernos nada. Lo hicimos aquí: Ver free tour.

Fueron tres horas de tour, pero lo cierto es que se nos pasaron volando. Conocimos historias relacionadas con las tabernas y bares más conocidos, con la vida y costumbres de los dublineses, nos contaron leyendas sobre Molly Malone, paseamos y pateamos por zonas no tan concurridas ni visitadas… Muy recomendable.
Ya sabes la mecánica de los free tour ¿no? No estás en la obligación de pagar nada, pero siempre se aconseja una pequeña propina para los guías, en función de lo que haya significado para ti la actividad. 😉
Disfruta de unas buenas pintas: la cerveza Guinness
La cultura de la cerveza está más que extendida en el país y una de las más reconocidas a nivel mundial, es la cerveza Guinness. Una cerveza de malta, elaborada de tal manera que sus principales características son ese intenso color oscuro y un sabor inconfundible. Si crees que no te va a gustar la cerveza negra, hazme caso y pruébala. No tiene nada que ver tomarla en Dublín 😉 Yo tuve esa sensación. No soy de cerveza negra, pero lo de aquí es de otro nivel…
Está la opción de visitar su fábrica. Nosotras no fuimos, pero te dejo este enlace en el que podrás reservar la visita: Página oficial de Guinness
Excursión a los acantilados de Moher
Si vas con tiempo, te aconsejo que reserves un día entero para disfrutar de una de las excursiones más bonitas que podrás hacer en los alrededores de Dublín. Los acantilados de Moher es uno de los paisajes más impresionantes de Irlanda.

¿Y cómo llegar hasta aquí? Nosotras lo hicimos mediante una excursión organizada, que reservamos en la siguiente página: Excursión acantilados de Moher
Si quieres despreocuparte y evitar alquilar un coche para llegar hasta los acantilados desde Dublín, es una buena opción.
Cogimos el autobús en la calle O’ Connell en Dublín, y tras unas dos horas de viaje, llegamos a nuestro primer destino: Galway. Una ciudad costera muy chula, de la que pudimos disfrutar durante hora y media. Nos tomamos un café y paseamos por su casco histórico, lleno de coloridas calles.

Tras esto, continuamos la excursión por una increíble carretera costera, donde con las vistas durante el trayecto, nos hicimos una idea de lo bonita que es la zona. Un paisaje kárstico, acompañado de enormes prados y campos de un intenso color verde. Una vez llegamos a los acantilados, nos dimos cuenta del valor de semejante maravilla de la naturaleza. 🙂 Ocho kilómetros de longitud y 210 metros de altura. Sin palabras.

Estuvimos durante dos horas. El día estaba nublado, pero por suerte, no tuvimos niebla, así que pudimos ver bien los acantilados y pasear por las zonas permitidas.
Si vienes unos 3 – 4 días, un día lo puedes dedicar a conocer los acantilados, es una excursión que te recomiendo muchísimo.
El barrio de la música y la cerveza: Temple Bar
Temple Bar, es uno de los barrios más turísticos y animados de Dublín, por tanto, la visita es más que obligada. Encontrarás música en sus calles, en sus bares… el barrio lleno de gente tomando algo, conversando… Si algo me gustó de esta ciudad fue eso.

Entrar en cualquier bar y disfrutar de una buena música en directo, mientras te tomas una sabrosa pinta de cerveza acompañada con algo para picar, considero que es uno de los mejores planes que podrás hacer aquí.
Trinity College: la universidad más antigua de Irlanda
En Trinity College, encontrarás una de las universidades más antiguas e importantes del país. Nosotras entramos al campus, donde dimos una vuelta por sus alrededores.
El acceso es gratuito, pero para poder entrar en la Biblioteca, si que se tiene que pagar entrada. Aquí se guardan manuscritos y ejemplares de hace siglos, donde destaca el Libro de Kells.
Recorre O’Connell Street
Sin duda la calle más significativa de Dublín, considerada la arteria principal y centro neurálgico de la ciudad. Suele ser punto de salida de la mayoría de las excursiones y tours que se pueden hacer dentro y por los alrededores de la ciudad y acoge una de las principales zonas comerciales.
Molly Malone: un icono de la ciudad
No te irás de Dublín, sin conocer la simbólica estatua de Molly Malone, una hermosa y bella joven, vendedora de pescado ambulante, que fue muy conocida en los años del siglo XVII.

Y como figura de la ciudad, se pueden oír historias y leyendas sobre ella, que ciertas o no, alimentan mas aún las ganas de conocerlas… Si quieres saber qué es lo que se cuenta de Molly Malone, te aconsejamos que realices el primer punto de nuestra lista: el free tour. 😉
Acércate al parque de Merrion Square y conoce la estatua de Oscar Wilde
Podrás seguir conociendo estatuas de personajes representativos, como la de Oscar Wilde, escritor y poeta de origen irlandés.

Ubicada en el parque Merrion Square, también es un buen plan, dedicar un tiempo a pasear y descubrir el resto del parque.
The Church, un bar-restaurante de lo más peculiar
Te sorprenderá saber que este bar-restaurante en la antigüedad fue una iglesia y hoy en día se ha reconvertido en un bar de copas de lo más singular. El lugar, construido a principios del siglo XVIII, actualmente mantiene muchas de las características originales de la iglesia. Nos acercamos a tomar unas copas por la noche y nos llamó la atención hacerlo en un sitio tan original como éste.
Ruta por las tabernas irlandesas de la ciudad
En la mayoría de las tabernas, podrás degustar comida tradicional, tomarte unas cervezas irlandesas y disfrutar de todo ello, mientras te acompaña una buena música en directo.

Por mediación de una amiga que vivió durante un tiempo en Dublín, he recopilado esta pequeña lista de bares y tabernas en Dublín:
■ O’ Neills Pub: con música en directo, comida tradicional y buenas birras, suele ser un bar muy visitado y concurrido, así que ve con tiempo para tener sitio. Estuvimos un día comiendo y tomando algo y la verdad que nos gustó bastante.
■ Temple Bar: desde luego la taberna más turística y conocida de la ciudad. Los precios de las pintas suelen ser un poco más elevados…pero a pesar de ello, es una parada más que obligatoria. Ármate de paciencia para pedir, porque vayas a la hora que vayas, lo encontrarás lleno.
■ The Storehouse: es muy amplio y tiene una gran variedad de cervezas.
■ The bleeding horse: uno de los bares más antiguos de Dublín, lleva abierto desde el siglo XVII. Hay varias leyendas en cuanto al nombre del local (el caballo sangrante). No estuvimos, pero la visita me parece cuanto menos curiosa. 😉
De todas maneras, creo que cualquier taberna te gustará, ya que representan totalmente la cultura del país.
¿Dónde comer en Dublín?
La gastronomía irlandesa está basada en alimentos primarios como la patata y la col (suelen acompañar la mayoría de sus platos con purés de patata o col hervida) o los estofados de carne. Son muy populares los irish breakfast (desayunos irlandeses), que a diferencia de lo que podamos pensar del desayuno tradicional español, aquí encontrarás un plato con salchichas, huevos, tocino, frijoles, morcilla… vamos, ligerito pal body 😂.

Algunos de los restaurantes que te recomiendo en el barrio de Temple Bar, son el Cornucopia, un restaurante vegetariano y el The Elephant and Tower, donde degustarás comida más tradicional. Cerca de Trinity College, se encuentra The Ginger Man, muy recomendable también. 😉
Visita las dos catedrales de Dublín: Christ Church y St. Patricks
No podía dejar de nombrar las dos emblemáticas catedrales que vas a poder ver en Dublín, ambas de origen medieval y protestantes.

Christ Church es la más antigua de las dos. Aunque ha sufrido varias restructuraciones a lo largo de la historia, su origen data de principios de siglo XI. Uno de los datos más curiosos es que fue construida por un rey vikingo de la época.

Por su parte, la catedral de St. Patricks se construyó entre finales del siglo XII y principios del XIII. Según la historia, ya existía en ese lugar una pequeña iglesia de madera. Está construida junto a un pozo. Este era utilizado por San Patricio para bautizar a aquellos que se convertían al cristianismo.
Disfruta de la música en directo en Grafton Street
No sólo podrás disfrutar de la música en directo en los diferentes pubs y tabernas de la ciudad, sino que en las calles abundan por cada esquina. Una de las principales de Dublín es Grafton Street, en ella no solo podrás ver y disfrutar del talento de los artistas callejeros, también encontrarás tiendas y pequeños comercios.
La verdad que fue algo que me gustó muchísimo, pasear por las calles peatonales de la ciudad y descubrir en cada rincón a un artista intentando ganarse la vida. Ahí descubrí a @alicetunneymusic, una maravilla de voz… 🙂
Descansa en el parque St Stephen’s Greens
Con días de sol, el parque se llena. La gente no duda ni un momento en venir a descansar, pasear, o simplemente tumbarse en el césped junto con su pareja o amigos, para aprovechar esos rayos de sol.

Nosotras hicimos lo mismo, y este pequeño parque era la excusa perfecta para hacer un alto en el camino y simplemente descansar y tumbarse un poco. Situado en pleno centro de la ciudad, no dudes en visitarlo. 😉
Alojarse en el centro de Dublín: la mejor opción
Y si dispones de pocos días, más recomendable todavía. Con la plataforma de Airbnb podrás encontrar apartamentos a buen precio, localizados en el centro de la ciudad.
Es una buena manera de aprovechar más tu estancia en Dublín y poder ver la ciudad a pie.
Nosotras nos alojamos en un piso muy bien ubicado, justo a un paso de la calle O’Connell. Amplio y bastante luminoso. Te lo recomiendo 100%. Podrás encontrarlo en el siguiente enlace: Nuestro alojamiento en Dublín
En los días que estuve en Dublín, descubrí una ciudad muy animada, viva y con muy buen ambiente. Espero que tengas la misma sensación. 😉
¡Buen viaje!